La oratoria, el arte de hablar con elocuencia, es una habilidad esencial para el desarrollo personal y profesional de los estudiantes. La elocuencia, por su parte, permite comunicar eficazmente para deleitar, conmover o persuadir a la audiencia. En este post, exploraremos cómo trabajar la oratoria de manera transversal, y por qué es crucial para el éxito de los adolescentes.
La importancia de la oratoria
La oratoria es una soft skill fundamental. La capacidad de comunicar de manera efectiva es una de las habilidades más demandadas en el mercado laboral actual.
Desarrollar la oratoria en los adolescentes no solo mejora su capacidad de comunicación, sino que también aumenta su confianza, pensamiento crítico y su capacidad para influir positivamente en su entorno. Además, es una habilidad que utilizarán en su día a día, y en cualquier situación.
Ejercicios prácticos para mejorar la oratoria
Trabajar la oratoria implica entender y aplicar una estructura clara en los discursos. A continuación, os presentamos una guía estructurada para que como orientadores ayudéis a los estudiantes a mejorarla.
El exordio es la primera parte del discurso cuyo objetivo es atraer la atención y la simpatía del auditorio. Un buen exordio debe ser interesante y relevante para el público. Aquí algunos consejos:
2. Argumentación
La argumentación es el núcleo del discurso y se basa en el método ARE: Afirmación, Razonamiento y Evidencia. Para una argumentación sólida, es ideal incorporar al menos dos de estos tres elementos:
3. La importancia de la práctica
Incorporar ejercicios prácticos es esencial para desarrollar la oratoria. Aquí algunas sugerencias:
Trabajar la oratoria de manera transversal prepara a los estudiantes no solo para enfrentar con éxito situaciones académicas, profesionales y personales, sino también para ser líderes efectivos y comunicadores persuasivos. Al desarrollar estas habilidades, estamos dando a los jóvenes las herramientas necesarias para destacar en cualquier campo que elijan.