Estás a punto de poder pasear por la Quinta Avenida de Nueva York sin salir de casa gracias al metaverso. Las grandes compañías tecnológicas compiten por presentar el mejor diseño de realidad alternativa que te meterá de lleno en el mundo virtual.
- ¿En qué trabajas?
- Soy abogado en un despacho virtual en el metaverso
Esta conversación puede ser verdad en poco tiempo. Un mundo paralelo al que entrarías con solo ponerte gafas, está en proceso de “fabricación”. Las grandes compañías tecnológicas, como Facebook, Apple o Microsoft, dedican gran parte de su dinero y esfuerzos en crear universos virtuales en los que entrar y salir cuando quieras. Será una realidad diferente que ya tiene nombre: Metaverso.
Seguro que estás pensando cuál es la diferencia entre el Metaverso y los videojuegos en los que juegas en línea con otras personas con avatares. Ahora puedes elegir un personaje que te represente y manejarlo a tu antojo mientras disfrutas del juego a través de una pantalla, normalmente la del ordenador o la de la televisión. Esto es diferente. No sólo por que vayas a ponerte unas gafas con las que verás en 3D sin pantallas de por medio. También entrarás en un mundo de fantasía; una realidad similar a la tuya, pero virtual. Por ejemplo, podrías estar en tu habitación, en tu calle o en la Quinta Avenida de Nueva York al mismo tiempo.
Es más, podrías caminar con personas que viven en la otra punta del mundo. Imagina que tienes un primo que vive en Australia y quedas con él para dar una vuelta a las ocho de la tarde por Central Park. Ambos pasearíais por el parque neoyorquino como si estuvierais allí en persona.
El objetivo de los expertos que trabajan en el metaverso es conseguir que esa realidad alternativa sea lo más parecida al mundo auténtico. Por eso, diseñan gafas con sensores que registran nuestros movimientos físicos y que incluso interpretan nuestras expresiones faciales. Así, todo el mundo sabrá si estás contento, triste o asustado. Además, al igual que en los videojuegos, podrás elegir tu aspecto físico. O bien mostrarte como eres, o bien ser diferente.
Las posibilidades del metaverso son casi infinitas. Desde trabajar en él creando negocios (empresas, tiendas, despachos…) hasta pagar con una moneda propia y virtual. De hecho, hay universidades como las CEU que ya están en el metaverso.
¿Sabes cuándo se usó por primera vez la palabra metaverso para referirse a esa realidad paralela? En una novela de ciencia ficción titulada “Snow Crash”. La novela cuenta la historia de Hiroaki Hiro, un repartidor de pizza en el mundo real, pero samurái en el metaverso, que un día está a punto de no entregar una pizza a tiempo y conoce a una patinadora que trabaja como mensajera.
¡Que el metaverso no te coja desprevenido! El futuro también es virtual.